¿Piratas?

Ayer, cuando ví el noticiario de un canal de televisión español, me asustó la manera unilateral, casi-soviética (exactamente trenta años después de la muerte de Franco) de cubrir la noticia del apresamiento de dos buques españoles en aguas de Slavbard al norte de Noruega.

El mensaje más o menos subliminal del reportaje era que hay una conspiración mundial en contra de las pobres multinacionales gallegas. Mensaje superficial que parecía dictado por la Ministra de Agricultura, Pesca y Aimentación de España (a su vez ex-directora del puerto de Vigo, de donde provienen los buques apresados).

Sin embargo, leo en La Voz de Galicia que los gallegos no son tan ingenuos: saben exactamente que los armadores de buques piratas les hacen a la larga mucho daño, y no quien intenta controlarlos: "Las pruebas con las que Oslo mostró al mundo las malas artes de un barco gallego han sacado los colores a todo el sector. Nadie, ni siquiera los sindicatos, osa abrir la boca", dice La Voz de Galicia.

También hoy La Voz de Galicia se hace eco de las investigaciones de Greenpeace-España. Asímismo, reproducen fotos donde se ve uno de los buques tirando por la borda sus capturas ilegales de fletán negro antes de ser apresados (como cualquier vulgar contrabandista).

El gobierno español (y la Unión Europea) no pueden hacer la vista gorda. Deben mostrar con sus actos claramente de qué lado están.